“El medioambiente nos exige buscar siempre la mejor opción”

Comentario
Escribe: Mario San Martín Aliaga
La instalaciones de nuevas fuentes laborales en la provincia de Ñuble, aparecen como prioritarias si se tienen en cuenta los índices sociales de cesantía, de pobreza etc. También como país debemos agregar la urgente necesidad de contar con nuestras propias fuentes de energía y evitar así la dependencia externa.

Todo proceso industrial conlleva una alteración en su entorno y afecta también a las personas, ante lo cual se debe velar por garantizar que esos impactos negativos sean mínimos.

Con preocupación hemos recibido la noticia que, a los cuatro trabajadores de la planta de celulosa en Nueva Aldea, eventualmente desahuciados por su contacto con materiales radiactivos, se suma una treintena con niveles de radiación superiores a lo permitido por ley.

Ahora, es importante lo señalado por la Comisión Chilena de Energía Nuclear que ha dicho que el accidente se debió, según un informe, a la deficiente capacitación y alta presión por terminar faenas en la planta de celulosa que se inaugurará a mediados de agosto, entre otros factores.

Por ello, en San Fabián, diversos integrante de la comunidad han expresado aprensiones respecto del proyecto de la Compañía General de Electricidad, orientado a instalar una central generadora de electricidad. Entre estas aprehensiones se indica que los canales pasarían por las laderas de los cerros lo que provocarían eventuales derrumbes por reblandecimiento de los terrenos y, además señalan que el proyecto en su conjunto afectaría la actividad turística.

Por lo ocurrido en la planta de celulosa de Nueva Aldea con ese desgraciado accidente radioactivo y por lo importante que es tomar medidas oportunas en el caso del proyecto de la central hidroeléctrica en San Fabián, es que la información y difusión de las características de estos proyectos deben llegar anticipadamente a todos los ciudadanos, a fin de que se tenga en su momento una opinión fundamentada.

Debemos estar abiertos a todas las opciones. Los centros de estudios e información técnica deben aportar lo suyo en estos temas, para no tener que lamentar posteriormente. El progreso tiene múltiples opciones y así , por ejemplo, en Llay-Llay se programa instalar 150 molinos de viento para lo cual se hizo un estudio de la zona durante 4 años. Este tipo de energía, que es común en Europa, no daña el medioambiente y al terminar la vida útil de estos remolinos metálicos de 100 metros de altura, son desarmados y el paisaje vuelve a ser el de antes.

Como hemos dicho, la tierra nos ha sido prestada y se la debemos entregar a las futuras generaciones en las mejores condiciones medioambientales para que ellos vivir.